martes, 22 de julio de 2008

¿DÓNDE ESTÁ LA OFICINA?

La flexibilidad en las empresas cada día más, es necesario aplicarla, sobretodo, en lo que respecta a nuestros empleados aunque, siempre, dentro de un mínimo control.

El futuro está en romper la barrera de los horarios rigurosos de presencia en el puesto de trabajo siempre que sea posible. Hay que “liberalizar” el sitio desde donde realizar nuestras tareas laborales. En esta ocasión no me estoy refiriendo a la modalidad contractual del teletrabajo que es otra opción. Simplemente, a dar libertad en el sitio desde el que desempeñar nuestro trabajo en función de nuestras propias necesidades. A veces, es mejor trabajar desde tu casa o desde otro lugar remoto distinto a tu oficina por distintas circunstancias. También puede surgir, incluso el hacer media jornada desde casa y la otra mitad desde la oficina.

A efectos reales, da igual porque, si tu cumples con tus tareas, debería ser indiferente desde donde las efectúes. Dotándonos de las herramientas de trabajo adecuadas, podemos efectuar nuestro trabajo desde cualquier sitio. Esto se puede extrapolar a un puesto típicamente de oficina o de atención al cliente en los que las principales herramientas de trabajo son un equipo informático y teléfono de empresa que se pueden instalar en cualquier lugar con facilidad.

A priori, os puede parecer descabellado pero, simplemente hay que experimentarlo y más trabajadores de los que pensáis se acogerán a esa flexibilidad de ubicación del puesto de trabajo. Con esto, deja de tener tanta importancia el concepto rígido de horario de trabajo, pasando a un segundo plano. Lo que más importa es cumplir con los plazos previstos para la entrega del trabajo, independientemente del número de horas que se dediquen al día desde la oficina o desde el lugar que elijas para desempeñar tu trabajo. Efectivamente, el control seguirá existiendo porque si durante una temporada larga se decide desempeñar tu trabajo desde otra ubicación distinta a la oficina, tendrás que reportar habitualmente a tu responsable sobre tus avances en tus tareas mediante alguna herramienta telemática.

Lógicamente, este tipo de flexibilidad respecto a la ubicación del puesto de trabajo es imposible a día de hoy en sectores industriales en la que la mayoría de los puestos requiere la presencia física en la fábrica por trabajar en cadenas de fabricación en las que es imposible realizar esto.

Dando esa libertad, también hay que cambiar el concepto de reuniones de trabajo ya que no es necesaria la presencia física de todos los miembros para poder realizarse. Es decir, puede hacerse vía multiconferencia en la que algunos asistentes estén presentes vía telefónica o telemática desde cualquier ubicación. Previamente, debería de haberse producido una coordinación entre los asistentes para hacerse llegar la información precisa para hacer este tipo de reuniones lo más productiva posible.

No obstante, tampoco hay que obsesionarse en deslocalizar a los trabajadores. El sentirse parte de una organización, de un grupo de trabajo,… también es necesario y reuniones periódicas deberían hacerse en la oficina o al menos, insistir en que fueran presenciales, donde todos los integrantes de ese grupo pusieran sus puntos de vista en común.

Pero volvamos a la propuesta de deslocalización de los trabajadores. Dando esta opción, se reducirán drásticamente en las organizaciones el índice de absentismo laboral, de bajas laborales, de solicitud de excedencias por diferentes circunstancias. Esto permite conciliar a muchas personas su vida profesional y familiar, sin renunciar a ninguna de estas facetas.

Los empresarios tienen que ver que, aunque ciertos trabajadores no desempeñen siempre su trabajo desde su oficina, van a poder llevar un control sobre ellos y estar al tanto de cómo van avanzando en sus tareas.

Muchos dirán que no es lo mismo, sin embargo, voy a lanzarles una pregunta ¿sabéis en todo momento lo que hacen vuestros trabajadores que están desempeñando físicamente sus tareas en la oficina? Pues a pesar de que os cueste reconocerlo, la respuesta va a ser no. Así que los trabajadores pueden “vaguear” en el cumplimiento de sus tareas, teniendo su puesto de trabajo en la oficina, en su domicilio o en una cafetería, en igual medida.

Efectivamente, la deslocalización tiene ciertos peligros, como el aislamiento del ambiente laboral, la incomunicación con sus compañeros de trabajo…

Esto son excusas porque el que las personas se sientan involucradas con sus organizaciones se pueden hacer de muchas formas, independientemente de que desempeñen su puesto de trabajo desde la oficina, haciendo eventos corporativos fuera del trabajo que incentiven el contacto entre compañeros. Incluso podríamos afirmar que muchos compañeros que están ubicados mesa con mesa en la oficina, tienen entre ellos incomunicación absoluta, por distintos motivos. La comunicación no es más fluida por tener el puesto de trabajo en la misma ubicación. Es cuestión de organizarse y coordinarse para que la comunicación sea un éxito, independientemente de la ubicación de cada parte participante en la comunicación.

No estoy diciendo que no haya complicaciones porque las tiene, sin embargo, hay que abrir la mente y estar abierto a nuevas posibilidades que van a ayudar a vuestras organizaciones a avanzar hacia el futuro. No olvidéis que hay que innovar en todo lo relacionado con el trabajo.

Debéis dotar a vuestras organizaciones de herramientas que faciliten el implantar estas medidas. Os puedo asegurar que se puede llevar un control igual de riguroso, independientemente de donde desempeñen su trabajo las personas que forman parte de vuestras organizaciones.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen post. Ya sabes lo que pienso al respecto :-)

Me alegra ver que este tema se haya debatido en varios blogs en las últimas semanas.

Creo que es bueno que la gente empiece a verlo como una realidad posible y no como un cuento de hadas.

JM

Juan Martínez de Salinas dijo...

Hola José Miguel,

Se que eres partidario de ello como yo. Somos conscientes de las dificultades pero hay que ponerse manos a la obra.

Hay que comenzar a verlo como una realidad alcanzable para comenzar a concienciar al personal que tiene que hacerlo posible.

Anónimo dijo...

A mí este tema me parece realmente interesante. Prueba de ello es que hace unos días hablé en el blog de Empleo de Universia del teletrabajo como una forma más de trabajo, que tiene muchas ventajas y no tantas desventajas como quieren hacernos creer.

Juan Martínez de Salinas dijo...

Hola Carol,

La Verdad que es un tema muy interesante.

Tiene más ventajas que inconvenientes y con el tiempo triunfara en todas las organizaciones.

Concha Barbero de Dompablo dijo...

Lo que propones, Juan, motivaría a los trabajadores. Efectivamente, la presencia no es sinónimo de responsabilidad.

¡Cuántos responsables de recursos humanos con tus ideas hacen falta en los trabajos!

GUILLERMO CEBALLOS SERRA dijo...

Hola muy bueno el blog.
Aunque todavia quedan cosas por ajustar , en muchas areas será la dirección a seguir. Ni ahablar del ahorro en metros cuadrados.
Saludos desde Buenos Aires
Guillermo Ceballos Serra

Juan Martínez de Salinas dijo...

Hola Concha,

Creo que todo es posible con ganas e intención de hacerlo.

Gracias por tu apoyo.

Saludos,

Juan Martínez de Salinas dijo...

Hola Guillermo,

Gracias por seguirme y por animarte a participar.

Efectivamente aun queda mucho por hacer, sin embargo, es la dirección a seguir en muchas areas. Hay que romper las fronteras para avanzar hacia el futuro.