domingo, 30 de marzo de 2008

VISITA DE BLOGGERS A EXPO ZARAGOZA 2008

Ayer tuve la suerte de poder visitar, en compañía de otros 79 bloggers, las obras de la EXPO, gracias a la invitación del departamento de comunicación de la organización de la muestra, que se portaron con nosotros durante toda la visita, de forma ejemplar; por lo tanto, antes de nada, agradecerles esta oportunidad de conocer, de primera mano, en qué estado están las obras, a día de hoy.

La hora para visitar el recinto de las obras fue muy acertada ya que coincidió con el parón para comer de la gran mayoría de los trabajadores de las obras. Esto permitió que pudiésemos acceder y ver de forma tranquila como marchan todas las infraestructuras necesarias para llegar a tiempo, sin entorpecer la frenética construcción que llevan a cabo.

La verdad es que soy un poco escéptico, porque faltan dos meses y medio para la inauguración y faltan muchos detalles de todas las obras. Llegar, llegaremos, pero a este paso, vamos a llegar con cosas sin terminar. No hay que olvidar que los detalles son importantes y dicen muchas cosas de la organización.

Por otro lado, al ir con los plazos tan ajustados, se exige mucho más esfuerzo a los trabajadores para que todo esté a tiempo. Esto conlleva horas extras, más estrés, menos descanso, etc.; si no se controla, termina en incidentes con suerte y sin ella, en accidentes laborales. Asi mismo, me preocupa la precariedad de los puestos de trabajo de la muestra y continúa mi opinión escéptica respecto a las numerosas declaraciones de los responsables políticos de que se va a realizar un gran esfuerzo por recolocar a los trabajadores de la misma.

No olvidemos que el 80% de los puestos de trabajo son en el gremio de la construcción, que esta empezando a notar una crisis, que se va a traducir irremediablemente, en perdidas de puestos de trabajo. Por lo tanto me gustaría conocer medidas concretas que se tienen previstas para reubicar a las personas que ahora mismo trabajan para la Expo. Hasta ahora, todo son buenos propósitos y no olvidemos que las palabras se las lleva el viento y lo que las ratifica son los hechos, que confió en que lleguen.

A mi, personalmente, el edificio que más me llama la atención y que me parece más espectacular a mi parecer es el pabellón de España. No soy técnico, pero el que se haya usado el método "botijo" para hacer que la temperatura sea más baja, tiene su cosa.

En este tipo de actos merece la pena participar. Animo a aquellos bloggers que no lo hayan hecho todavía a que se animen para próximas actividades. Aunque según nos contaron, dentro de nada, se cerrará el recinto. Pero quién sabe si cuentan con nosotros para la prueba previa a la inauguración. La propuesta se hizo.

¿PORQUÉ NO ME HAN SELECCIONADO A MI?

¿Qué tal te ha salido la entrevista?

Pregunta usual de amigos y familia, a la que solemos contestar "Bien" y, en casos, incluso alardeamos de nuestras respuestas.

Pero muchos candidatos, tras realizarlas y no haber sido elegidos, no hacen un análisis exhaustivo de cuales son los motivos. Normalmente se dedican a tirar balones fuera, echando toda la culpa al entrevistador, a la empresa, a hechos circunstanciales, a la mala suerte, etc.

Pienso que todos los candidatos tienen que creer en ellos mismos y en sus posibilidades. Sin embargo, hay que ser realistas. Muchos son los que se tienen demasiado amor y son incapaces de reconocer sus propios errores. Y aquí reside un grave error. No ser conscientes de lo que uno hace mal.

Todos, por muy duro que pueda resultar, tenemos que tener espíritu crítico con nosotros mismos y saber reconocer que el motivo por el cual nos han desechado ha sido por nuestra propia "irresponsabilidad", al no haber hecho las cosas de forma correcta. Tenéis que tener en cuenta que en las entrevistas de trabajo no existe la segunda oportunidad. Hay que llevar todo controlado y preparado, aunque con ello no tienes garantizado el éxito.

Siempre vas a tener una parte incontrolable en toda entrevista; lo sé, es un poco desanimador este comentario, pero el prepararse todos los datos que uno pueda para un proceso de selección ayuda bastante más que llegar "in albis". Además, un porcentaje del éxito, no depende de ti por muy bien que te haya ido la entrevista o a pesar de que tu perfil encaje a la perfección. A veces, no somos seleccionados por que hay alguien que se ha desenvuelto mejor que nosotros.
Eso hay que aceptarlo y asumirlo para no llevarte decepciones evitables.

Pero concentrémonos en los errores típicos que se cometen en las entrevistas, que hacen que sus candidaturas sean desechadas. Tenéis que tener en cuenta que la labor principal del entrevistador es identificar candidaturas que a primera vista parecen encajar y quedarse solamente con la idónea para ellos y su organización. Obviamente, estos errores no son exclusivos ni excluyentes.

1.- CRITICAR A EMPRESAS anteriores o actuales. Nadie duda de que podáis tener mayor o menor razón. Lo que hay que tener claro es que los "trapos sucios" de tus anteriores trabajos se tienen que quedar par vosotros. Tampoco se te ocurra descalificar a tus compañeros o superiores jerárquicos. Pensad que nadie quiere que sus cosas internas se "aireen". Si tu criticas a tu empresa actual, ¿quién dice que no lo harás con esta a la que estás optando?

Una entrevista tiene que servir para demostrar lo positivo de vuestra trayectoria profesional. Si por cualquier causa tenéis dificultades en vuestra empresa, ni le va ni le viene al entrevistador y según qué posición, puede dar mala imagen tuya, pues no has sabido solucionar un problema.

2.- MOSTRAR DESINTERÉS por el puesto o por la compañía a la cual acudís. ¡Qué menos que investigar algo de esa compañía para poder formular preguntas sobre dudas que os surjan sobre ella! Las compañías quieren incorporar cada vez más nuevos recursos que se les vea interesados en ellas. El desinterés es un mal compañero de viaje.

3.- ARROGANCIA en tus respuestas. Una cosa es estar seguros de vosotros mismos a lo largo del desarrollo de la misma y otra la arrogancia. Los entrevistadores buscan incorporar candidatos que demuestren firmeza y seguridad, pero siempre con los piés en el suelo. La actitud arrogante se percibe muchas veces, no por lo que decís, sino por cómo lo decís. Quizás vosotros mismo no os deis cuenta, por lo tanto, como os he dicho anteriormente, hay que prepararse una entrevista, y lo mejor es pedir consejo a personas de vuestra confianza para que os hagan un análisis de vuestras respuestas.

4.- CENTRARSE EN EL TEMA. A veces incidimos más de la cuenta en dar explicaciones personales que no vienen al caso, sin darnos cuenta de que nos perjudica totalmente. Tenéis que centrar vuestras respuestas: A los entrevistadores hay que contarles lo justo. Recordad que si quieren saber algo, lo van a preguntar sin dudarlo y si no les queda claro volverán a insistir sobre ello. Las empresas quieren incorporar trabajadores que sepan dejar a un lado sus problemas personales porque no hay que olvidar que a ellas se va a trabajar. Cuidado, no estoy diciendo que contestéis en formato telegrama. Lo que decís, hay que desarrollarlo, pero no lo olvidéis, centraos.

5.- ELECCIÓN DE DATOS. Otro error muy común es que a la hora de hablar sobre vosotros mismos no elegís aquello que más beneficia a vuestras candidaturas. Cuando tenéis que explicar que mejoraríais de vosotros mismos, hay que saberlo enfocar de una forma positiva dando explicaciones que ratifiquen eso. Nunca se os ocurra decir que no tenéis nada que mejorar de vosotros mismos ya que la perfección no existe y esto significa tarjeta roja y expulsión del proceso de selección. Otra cosa imperdonable es no saber destacar nada de vosotros mismos.
Estas cosas demuestran a los entrevistadores la prepotencia o desidia que dais a vuestras personas.

6.- CUIDADO CON LOS "PEROS". Muchos candidatos ponen miles de pegas al puesto de trabajo e ir con exigencias inamovibles con respecto a las funciones, horario, jornada, etc. Está claro que el trabajo os debe permitir conciliar la vida profesional con la personal; hasta aquí de acuerdo. Sin embargo no olvidéis que todo trabajo os va a exigir sacrificios y concesiones; no pretendáis que sean solo las empresas las que se amolden a vosotros. Tiene que producirse una adaptación mutua para que las cosas comiencen con buen pie. Todos tenemos que velar por nuestros intereses pero haciéndolo de forma objetiva y razonable.

7.- EL TEMA ECONÓMICO. No suele ser muy positivo mostrar que solo os interesa el tema económico del puesto. No vamos a negar que el salario es importante y necesario para todos. Como dice un amigo mío, todos somos unos mercenarios; trabajamos por dinero. A una empresa, le interesan los candidatos que aportan algo a la organización. No mostrarán interés por aquellos que de primeras pregunten por la pasta. Este tipo de personas en cualquier momento les dejarán tirados, ya que pertenecen a una clase, siguiendo con el comentario de mi amigo, de mercenarios supremos. Normalmente se hablarán de condiciones en una segunda fase.
También es cierto que las compañías al menos tienen que ofrecer un salario digno que compense a lo que se exige a los candidatos, algo que algunas no lo hacen.

Tened en cuenta estas cosas que comento porque si os paráis a pensarlas, vais a descubrir el verdadero motivo por el cual fue desechada vuestra candidatura; además, os ayudará a ponerle remedio en la siguiente entrevista.

Esto simplemente es el comienzo de la lista. Estoy seguro que todos tenemos en mente más errores, así que os invito a que los aportéis, para ir completandola. Me gustaría que alguno más aportara su granito de arena a este blog.

jueves, 27 de marzo de 2008

LOS COMIENZOS DEL ENTREVISTADOR

Las personas que deciden dedicarse profesionalmente a los recursos humanos tienen un largo aprendizaje para conseguir adquirir la experiencia que les permita desempeñar su puesto de trabajo con excelencia.

Por norma general, en este sector, acabamos fundamental licenciados de carreras de letras de todo tipo (psicología, derecho, relaciones laborales, trabajo social, empresariales, etc.) que decidimos realizar un máster específico sobre este área para formarnos y, si nos gusta, dedicarnos a ello. Obviamente, nunca se puede generalizar porque, a veces, encontramos perfiles atípicos dedicándose a los recursos humanos. No olvidemos que la formación especifica ayuda sin embargo, no lo es todo.

Una vez conseguida una oportunidad, (convenios de prácticas, contratos de prácticas, etc.) comienza un largo camino para adquirir la experiencia necesaria aplicando todos los conocimientos teóricos que tenemos. Hay que dejar claro que uno puede ser técnico generalista o técnico específico de un área concreta de las que hay en los recursos humanos.

Voy a centrarme específicamente en los comienzos de un técnico de selección en su papel de entrevistador, incidiendo en las cosas que considero importantes tener en cuenta.

Una de las primeras cosas que tenéis que tener claro si estáis comenzando en el puesto de seleccionador, es la preparación exhaustiva de las entrevistas porque, no olvidéis, que ninguna entrevista es igual, a pesar de que sean para el mismo puesto de trabajo.

Tenéis que hacer un análisis personalizado del CV de cada candidato, apuntando aquellas cosas que os generan dudas que serán sobre las que más tengáis que incidir. Sin preparación e improvisando pasaréis por alto muchos detalles importantes que os pueden hacer elegir al candidato erróneo.

Vuestra principal tarea es saber detectar al candidato más adecuado para el perfil que requiere vuestra organización, sabiendo interpretar los diferentes mensajes que nos da el candidato.

No olvidéis que, ante todo, tratáis con personas y que vosotros estuvisteis o podréis estar en un futuro en el papel de entrevistado. Hay entrevistadores que parece que olvidaron la humanidad en el desempeño de su trabajo y eso es un error, pese a quien pese.

Tenéis que ser puntuales a la hora de comenzar las entrevistas ya que el tiempo de los entrevistados es igual de importante que el vuestro. Así que si vais a llegar tarde por cualquier razón, avisad al candidato para que no tenga la sensación de que os olvidasteis de él. Esto da muy mala imagen de vosotros y de la empresa a la que representáis. Los desechados hoy por no encajar con el perfil, pueden ser los candidatos idóneos en un futuro y sea cual sea el resultado de su entrevista tiene que quedarse con una imagen positiva de la misma.

Vuestra imagen también es importante, así que tenéis que cuidar vuestro aspecto y acudir a vuestras entrevistas vestidos en plan formal siendo fieles a la imagen corporativa de vuestra compañía. No olvidéis que vosotros sois representantes de la compañía y cada candidato va a adquirir la primera imagen de la misma en función de la impresión que le causemos. Así que nada de pasar por alto este detalle.

Las entrevistas las tenéis que realizar concentrados al 100% en ellas, así que, debéis acudir a las mismas sin dispositivos que os puedan interrumpir (teléfono móvil, agenda electrónica, etc.). Si interrumpís habitualmente vuestras entrevistas estáis dando una mala imagen a esos candidatos; parece que no deis importancia a esas entrevistas. Si pedís respeto y educación a los candidatos sois vosotros los primeros que tenéis que hacer lo mismo hacia ellos.

Debéis calcular el tiempo necesario para poder realizar cada entrevista de forma adecuada y así recopilar los datos que necesitéis saber para estar seguros de si cada candidato encaja o no con el perfil buscado. Debéis indicar a cada candidato el tiempo aproximado de duración de la entrevista para que acoplen sus agendas. Nada de interrumpir las entrevistas porque tengamos otros compromisos en nuestra agenda sino hemos acabado la entrevista. La preparación previa de cada entrevista nos permite calcular con exactitud el tiempo que precisamos para la misma.

Tenéis que llevar un orden a la hora de desarrollar cada entrevista. Es decir, debéis seguir una estructura e ir cerrando los diferentes bloques. Eso sí, no es adecuado ir mezclando preguntas de diferentes apartados no relacionados debido a que puede hacernos dejarnos de preguntar cosas importantes por haber perdido el guión.

El ritmo de las entrevistas lo tenéis que llevar siempre vosotros ya que sois los que marcáis el camino a seguir para obtener la información que necesitéis. Está claro que podéis usar diferentes tipos de entrevistas en función de la que más os interese, en función de cada candidato o del perfil a seleccionar.

Las preguntas que les formuléis a los candidatos sobre los diferentes aspectos de sus CV las tenéis que adaptar a ellos para que las entiendan y os contesten lo que precisáis. Recordad que las cosas se pueden preguntar de muchas formas en función del perfil de la persona a las que la formulamos. La adaptación es clave en el trabajo de entrevistadores.

Luego tenéis que ser muy observadores durante la realización de cada entrevista que realicéis prestando detalle e interpretando lo que nos dicen y lo que no nos dicen los candidatos, recibiendo y anotando los mensajes que nos llegan por diferentes canales. Cada día más, los candidatos se preparan a conciencia y esto hace que sea más difícil desvelar la verdadera cara de cada candidato. Esto nos hace ser más exigentes en el desempeño de nuestro papel, a la vez que le pone mayor emoción a nuestro papel de buscadores de los candidatos idóneos para los perfiles específicos que precisamos incorporar.

Debéis hablar los justo y necesario. Al fin y al cabo lo que tenéis que conseguir es que cada candidato nos cuente las cosas que nos interesan saber. Así que tenemos que crear un ambiente distendido para conseguir que los candidatos se relajen. Tenemos que orientar y saber sacar a cada candidato la información precisa. Así que hay que usar diferentes tácticas en función de cada entrevistado. El candidato debe hablar el 80% del tiempo y nosotros el 20%. No olvidéis que los candidatos también intentan obtener información de vosotros y hay personas con mucha preparación, así que, cuidado.

No debéis mentir a la hora de contar los aspectos específicos de cada puesto ni de vuestra organización, porque la verdad, tarde o temprano, sale a la luz. Los candidatos elegidos tienen que aceptar vuestra oferta con el conocimiento de la información veraz sobre el mismo. Sino cumplimos esto, vamos a perjudicar seriamente la imagen de nuestra empresa; vosotros sois los que la representáis. Además, esto diferencia a los buenos de los malos profesionales.

Aunque tengamos poco tiempo debéis tratar igual de bien a los candidatos elegidos que a los desechados. O lo que es lo mismo, todas las personas que han dedicado parte de su tiempo a mostrar interés por vuestra organización tienen derecho a saber en qué estado queda su candidatura. Esto cuesta menos de los que os pensáis y da muy buena imagen de las organizaciones que cuentan con entrevistadores que lo hacen. Insisto, todos los candidatos son importantes.

Debéis de ser exigentes con vosotros mismos y analizar cada entrevista que realicéis para detectar aquellas cosas que podéis y debéis mejorar. La primera entrevista que realicéis como entrevistadores no será la mejor de vuestra vida, eso sí, la segunda irá mejor que la primera, la tercera mejor que la segunda y así, sucesivamente. Con esfuerzo y dedicación veréis la recompensa que será el convertiros en excelentes entrevistadores en un futuro próximo.

martes, 25 de marzo de 2008

LAS PRIMERAS ENTREVISTAS DE TRABAJO

Cuando uno finaliza sus estudios y se enfrenta al mercado laboral, se da cuenta de lo bien que se vivía en la etapa de estudiante. ¡Que tiempos aquellos! Nuestras únicas preocupaciones eran los exámenes, los apuntes, los ejercicios... Todo lo bueno acaba y hay que buscar trabajo.

Tras elaborar nuestro CV y echarlo a múltiples ofertas de trabajo, consultoras, empresas de trabajo temporal, autocandidaturas a diferentes organizaciones, rellenar formularios de las webs de las empresas, etc;
comienzan a surgiros las primeras entrevistas de trabajo.

Antes de acudir a la entrevista, tendríais que pedir que os concretasen el puesto para el cual os han llamado. Es la mejor forma de no hacer perder el tiempo a las empresas, ni a vosotros mismos. No olvidemos que el tiempo de todo el mundo es valioso y hay que saber en qué lo invertimos. Si la organización no os concreta para qué puesto os van a realizar la entrevista, soy de la opinión que no merece la pena acudir. Eso sí, no pretendáis que la información se os de con todo detalle, pero sí, a rasgos generales.


Si os han llamado, tened claro que vuestro CV ha conseguido el primer objetivo: llamar el interés de las empresas.

Como consejo, os recomiendo hacer un listado de todos las ofertas a las que enviáis vuestro currículum. Causa buena impresión recordar los detalles de la oferta a la que enviaste tu CV. También algún detalle como el puesto y otras características que aparezcan en el anuncio/oferta.

Las entrevistas de trabajo las tenéis que PREPARAR, sino estáis perdidos. Tenéis que saber sin dudas lo que habéis reflejado por escrito en vuestro CV. La persona que os haga la entrevista la llevará preparada y os va a preguntar cosas específicas de vuestra trayectoria profesional y personal para resolver sus dudas acerca de si sois lo que buscan para ese puesto. No penséis que por haberos citado a una entrevista ya tenéis el puesto en vuestro bolsillo. El proceso de selección no ha hecho más que comenzar. El no conocer los datos de vuestro CV da muy mala impresión. Normalmente, lo que no se recuerda es porque realmente no ha pasado y suele ser la forma más normal de percibir las mentiras de los currículos.

Es muy recomendable que busquéis información de la empresa a la cual vais a ir a realizar una entrevista de trabajo ya que tenéis que demostrar interés. (A veces, se trata de consultoras, que no desvelan el nombre de la empresa hasta una segunda entrevista). Esto os dará una idea de esa organización y os permitirá preguntar aquellas dudas que os surjan al respecto. Si no conocéis nada de esa organización indicadlo, ya que se pilla antes a un mentiroso que a un cojo. Ante todo hay que demostrar sinceridad. La mentira, lo único que consigue es sumar puntos negativos a vuestra candidatura.

La puntualidad es fundamental así que si no conocéis la ubicación del sitio donde tenéis la entrevista, investigad y practicad cómo llegar allí unos días antes, para evitar perderos a ultima hora. Si por cualquier circunstancia, fuerais a llegar tarde, AVISAD. No habéis quedado con un amigo vuestro, sino para una entrevista.
En estos casos la primera impresión es la que queda.

Tenéis que dar importancia a estas cosas demostrando vuestra educación y respeto hacia los demás. El llegar tarde o no acudir a una entrevista sin avisar es de personas que no merecen una segunda oportunidad. Esto las empresas lo hacen constar en vuestra solicitud de empleo.

No hay que llegar tarde pero tampoco demasiado pronto ya que ningún extremo es positivo. Recordad que los entrevistadores tienen unas citas que cumplir y si te han dado las 11 no lleguéis a las 10, porque lo único que vais a hacer es poneros más nerviosos. Lo más correcto es llegar unos 10 ó 15 minutos antes de la cita para evitar ir con prisas.

Dad importancia a vuestra imagen personal. Tenéis que ir vestidos de acuerdo a la situación a la que os enfrentáis y si os surgen dudas preguntad a personas cercanas a vosotros que tengan experiencia ante estas situaciones. No olvidéis que una imagen vale más que mil palabras. Insisto, no vais de fiesta ni a comprar el pan sino a solicitar un puesto de trabajo. Quedan excluidos de vuestra vestimenta chándals y zapatillas guarras. Las limpias, también.

Preparaos para afrontar preguntas incomodas sobre cosas de vuestros CV que no os agraden. Hay que comportarse de forma natural y contestarlas siendo vosotros mismos. En la mayoría de las ocasiones se formulan para ver vuestra reacción y comportamiento ante situaciones tensas no siendo tan importante el contenido de la respuesta.

Si es posible preguntad cuánto tiempo va a durar la entrevista; si no os lo indican, no hagáis planes en ese espacio de tiempo. Es muy negativo interrumpir una entrevista comenzada porque tengáis que marcharos a otro compromiso sin haberlo avisado previamente. Hay que saber diferenciar la importancia de cada cosa. La novia o el novio, pueden esperar.

Procurad ir tranquilos dentro de las circunstancias ya que los nervios os pueden jugar muy malas pasadas. Una vez que comience la entrevista tenéis que estar en una posición cómoda; evitad a toda costa posturas estáticas o dinámicas en exceso. Analizad lo que decís y medid vuestras palabras; todo se observa. Evitad las coletillas. Todos las tenemos en nuestro lenguaje coloquial, pero no debemos traspasarlas a este ámbito.

Una buena práctica es simular entrevistas de trabajo con amigos o familiares para ver cómo os comportáis ante estas hipotéticas situaciones. Así trabajaréis con ventaja y podréis poner remedio a las cosas que hayáis identificado.
Recordad que todos estuvimos en vuestro situación en algún momento.

Queda terminantemente prohibido (parezco un profesor en medio de una clase) mascar chicle durante el transcurso de la entrevista, al igual que ser interrumpido por tú teléfono móvil. NO ES MOMENTO de contestar llamadas; después de acabar, sí. APAGA el móvil o ponlo en silencio.

No preguntéis cosas que no vienen al caso o que ya se os haya dicho que se detallarán en otras fases del proceso de selección; todo tiene su momento.

Prestad atención a lo que os pregunten: quieren que seáis concretos y no que os vayáis por los "cerros de Úbeda". Si no os habéis enterado de la pregunta, pedid que os vuelvan a formular la pregunta de forma más clara. (No hay que olvidar a San Por Favor).

Otro consejo que os doy es que ante todo no interrumpáis al entrevistador; si lo hacéis, recordad pedir disculpas. No estáis debatiendo con los colegas sobre el partido de fútbol del Zaragoza o si bajaremos a segunda.

Tenéis que saber demostrar sentido común en el transcurso de toda la entrevista, sin bajar la guardia;
la entrevista finaliza tras la despedida no antes, no lo olvidéis.

Una vez acabada la entrevista es importante que analicéis lo que ha ocurrido en la misma y apuntéis las cosas positivas y negativas que hicisteis. Una vez detectados los puntos negativos tendréis que encontrarles explicación y buscarles solución. Las cosas negativas se pueden transformar en positivas; solamente hay que trabajar sobre ello para conseguirlo.

No se os ocurra tutear al entrevistador a no ser que él os de permiso para que lo hagáis.

Por favor tenéis que prestar mucha atención a estas cosas. A vosotros os parecerán que no tienen demasiada importancia pero os puedo asegurar que todo cuenta. Algunos puntos os parecerán increíbles, incluso graciosos, otros no tanto, pero todo lo que he mencionado han sido detalles que he tenido en cuenta en mis entrevistas.

domingo, 23 de marzo de 2008

MI PRIMER CURRÍCULUM VITAE

Hoy vuelvo atrás en el tiempo a aquellos años cuando estábamos finalizando nuestros estudios universitarios/grado superior formación profesional.

Somos aun muy jóvenes y nos quedan muchas cosas por hacer. A la vez que se nos pasan muchas cosas por nuestra cabeza sobre lo que nos gustaría hacer en el futuro. En bachillerato, nos acosan nuestros profesores con la decisión que marcará nuestra carrera universitaria. De la misma forma que tuvimos que buscar una dirección entonces, ahora, toca centrarnos y decidir cual de las opciones laborales es la más adecuada para nosotros.

Decidir es complicado pero no imposible, eso sí, tenéis que decidir vosotros mismos, el pedir consejo no significa hacer lo que harían nuestros familiares o amigos. Lo mejor sería apuntar todas esas posibilidades en una hoja y buscar los pros y los contras de todas. Posteriormente quedarte con las opciones que más te convencen y estudiarlas con detenimiento recopilando toda la información necesaria que nos hará decantarnos por una u otra.

Tenemos ya la orientación laboral preferida, y ahora, necesitamos responder varias preguntas sencillas pero fundamentales:

¿Qué trabajo buscamos?
¿Con qué finalidad?

Y por muy fáciles que parezcan inicialmente, la respuesta, no deja de ser un gran problema. Una vez encaminados, la siguiente tarea es elaborar nuestro primer Currículum Vitae. Estas "palabrejas", provienen del latín y significan literalmente, carrera de la vida. Básicamente, es un documento que va a resumir lo más importante de tu vida laboral o formativa. El enfrentarse ante un papel en blanco (ahora, una pantalla en blanco) es muy difícil y tendemos a buscar algo sobre lo que trabajar. Algún currículum de algún amigo o incluso buscar algo por internet. Eso, es una forma de empezar. Pero normalmente, un "novato" lo elabora sin ningún tipo de objetivo o fin y eso es un gran error.

El hacer un CV tiene un fin claro: el de buscar el primer empleo. Es usual hacer un listado donde recopilaremos diferentes datos personales y académicos que, en si, no dicen nada. Ahora tendremos que darle forma.

Por lo tanto, antes de comenzar, tenemos que ver qué estrategia es la más adecuada para ayudarnos a conseguir nuestro objetivo. El objetivo genérico de conseguir un empleo se subdivide en varios:

- Nuestro CV tiene que llamar la atención de cara a conseguir una entrevista de trabajo, que es el primer paso.

- En la entrevista de trabajo tendremos que saber "vendernos" bien para conseguir el puesto de trabajo al cual hemos optado.

Al fin y al cabo, no olvidemos que, de cara a buscar empleo, somos "un producto" para las empresas. Es por esto que tenemos que saber vendernos bien para que nos elijan a nosotros y no a cualquier otro de los "productos" que les llegan para ese puesto en concreto.

El CV tiene que estar redactado de forma sencilla pero, a la vez, profesional. Tiene que llevar un orden lógico. Ha de estar bien estructurado para que, con un golpe de vista, se pueda ver lo más esencial; es decir, hay que saber resumir contando lo más importante. Nuestro CV tiene que estar limpio en todos los sentidos (sin machas, ni faltas de ortografía, etc.). Hoy en día se envían impresos, por lo que no olvidéis de hacerle una corrección ortográfica.

Recordad también que el CV que entreguéis en cualquier empresa tiene que ir en una carpetilla o sobre que guarde su apariencia. No lo podemos dar arrugado, ni con múltiples dobles.
Es obvio que no tenemos experiencia profesional a la hora de buscar nuestro primer empleo, sin embargo, eso no es excusa para no comportarnos con profesionalidad. Estos pequeños detalles que para muchos no dicen nada, son muy importantes y dicen muchas cosas positivas o negativas sobre nosotros mismos.

Los CV no tienen porque cumplir la misma estructura, como tampoco hay una única forma de hacerlos; depende de cada persona. La elaboración del CV nos permitirá dejar nuestro propio sello personal. También va a depender de qué estemos buscando; no es lo mismo estar detrás de una mejora de empleo, que un trabajo para compatibilizar con nuestros estudios o nuestro primer trabajo tras la finalización de nuestros estudios.

No obstante, yo recomiendo seguir este orden:

1.- Datos personales.
2.- Perfil de trabajo.
3.- Experiencia Laboral.
4.- Titulación Académica.
5.- Formación no reglada.
6.- Idiomas.
7.- Informática.
8.- Aficiones.
9.- Puntos fuertes y puntos débiles.

Estos son los apartados que deberían aparecer, en todo CV. Eso sí, tendremos que quitar aquellos que no nos afecten inicialmente y sustituirlos por aquellos que sean más interesantes. El orden de los mismos puede variar; el único inamovible desde mi punto de vista es el de los datos personales. El resto pueden cambiar su orden de aparición en nuestro CV, pero habrá que tener en cuenta que todo aquello que esté en la primera página va a ser lo que más importancia va a tener, pues es la página que normalmente se tiene delante. Es por ello, que aconsejo que sea en la primera página donde se "explote" todo lo que sabemos o podemos hacer que se ajuste al perfil que se busca.

Las personas que buscan su primer empleo, está claro que no va a tener experiencia profesional en aquello relacionado con sus estudios. Normalmente, con una sola página sería suficiente para resumir nuestra experiencia. Si necesitamos añadir algún aspecto adicional, siempre lo podremos hacer en la carta de presentación. Será cuando tengamos más experiencia que podremos ampliar nuestro CV a máximo 2 folios. Experiencias laborables y cursillos serán mencionados y ampliaremos detalles durante la entrevista de trabajo. Un CV no es preparar una memoria de nuestra vida profesional sino es una estructura esquematizada de nuestra trayectoria.

Sin embargo, si ha trabajado en otro tipo de puestos, hay que ponerlos. Aunque parezca mentira, alguien que ha compatibilizado estudios y trabajo es bastante positivo y normalmente se tiene en cuenta. Tampoco deberíamos olvidar las prácticas. Obviamente, en un futuro cuando ya tengamos experiencias profesionales propiamente dichas, desaparecerán de nuestro CV.

Tenemos que plasmar aquellas cosas específicas que conocemos de cualquier aplicación o disciplina que van a ayudar a decantar vuestra candidatura en uno u otro sentido. A nivel de ejemplo ingenieros informáticos que buscan su primer empleo no indican qué lenguajes de programación, bases de datos, etc.; conocen cuando es un dato fundamental a la hora de estudiar su CV para citarle o no a una entrevista.

Así que, por favor, tenéis que saber identificar las cosas importantes o secundarias en vuestro CV. No es cuestión de copiar el de nuestros amigos. Eso no nos va a ayudar. Tenemos que analizarnos detenidamente para saber qué es lo que tenemos que reflejar o no de nuestra trayectoria en nuestro CV.

Para sacar adelante vuestros estudios habréis tenido que dedicarle tiempo a la materia y prepararos para superar con éxito los diferentes exámenes. La búsqueda de empleo no deja de ser un examen más. Es por ello que os tenéis que preparar y dedicarle tiempo suficiente para elaborar vuestro CV.

Un gran error que todos hemos cometido es hacer un CV y lanzarlo al mundo para toda oferta posible. No hay dos ofertas iguales. Así pues, tenemos que saber adaptar nuestro CV a cada oferta, ya que en función de la oferta, habrá que destacar más unas cosas que otras.

Y hablando de errores, hay uno que se comete bastante. MENTIR. El mentir en un currículum no va a ayudarte. Es cierto que puede que te llamen a entrevista, pero los seleccionadores, sabrán buscar la verdad y si encuentran la mentira, automáticamente te habrás descalificado en el proceso. Así que no os recomiendo contar cosas que no son verdad.

Otro gran error, es no prepararse la entrevista. El currículo será la información que el entrevistador tenga delante cuando te estén conociendo. Todo lo que cuentes, ha de coincidir con lo que pones en el currículum. Tendrás que tener en mente, fechas, cursos, instituciones donde has cursado los diferentes cursos... Date cuenta que estarás nervioso y los seleccionadores te harán preguntas y tienes que saber contestar.
A parte no olvidéis que estáis en proceso de aprendizaje y, por lo tanto, lo importante no es hacerlo bien a la primera sino aprender de nuestros errores iniciales.

En resumen, hay que tener las ideas claras de qué puesto queremos; tendremos que orientar nuestro CV a cada puesto, seremos concisos, nos venderemos bien, no mentiremos y en la entrevista, desarrollaremos en más detalle los diferentes aspectos que creamos necesarios ampliar.

NUEVAS VÍAS DE COLABORACIÓN

Desde hace ya tiempo, todas las organizaciones conocen las vías más adecuadas y habituales para publicitar sus ofertas de empleo: insertar sus ofertas de personal en los portales de empleo (infojobs, infoempleo, etc.) y en los suplementos de empleo de diferentes periódicos de tirada nacional, autonómica o local (El País, El Mundo, El Heraldo de Aragón, etc.).

También, en un momento dado, pueden ayudarse a través de colaboraciones con consultoras especializadas de reclutamientos para perfiles cualificados y con empresas de trabajo temporal para perfiles de bajo nivel.

Desgraciadamente, la autocandidatura cada vez tiene menos relevancia. Hace unos años llegaban a las empresas multitud de solicitudes de empleo, sin ningún esfuerzo por parte de las mismas. Hoy en día, la gente que busca empleo ha cambiado los hábitos a la hora de buscar su primer empleo o mejorar de empleo. Por lo tanto, las empresas se tienen que adaptar a los cambios de los potenciales candidatos para llamar su atención.

Sin embargo, con todo esto, no es suficiente, ya que estas herramientas las usan todas las empresas sea cual sea su tamaño. Así pues, hoy en día, hay que buscar la novedad de cara a innovar en la búsqueda de personal para nuestra organización.

Hace unos días me pasaron información de un nuevo acuerdo de colaboración entre un portal especializado como
JavaHispano y una empresa para que publicitase sus ofertas de empleo, no en la sección de foro de empleo como es lo habitual en estas webs, sino como noticia destacada para que la difusión sea mucho mayor de esta manera.

Personalmente creo que estamos ante una nueva herramienta para que las empresas puedan dar a conocer sus ofertas de empleo en la red a través de acuerdos de colaboración específicos con portales o comunidades profesionales que reciben gran número de visitantes y que les va a permitir tener una difusión enorme entre los usuarios o visitantes ocasionales de esas páginas.

Cada vez más, los departamentos de recursos humanos de las organizaciones tenemos que buscar la originalidad y la novedad en las formas de poder dar a conocer nuestra necesidades de personal. No hay límites siempre y cuando funcione rompiendo con lo habitual entre todas las compañías a la hora de buscar empleo.

miércoles, 12 de marzo de 2008

"NECESITO GENTE"

El departamento de recursos humanos es el encargado de reclutar los diferentes perfiles profesionales que se requieren por parte de los diferentes departamentos de su empresa.

Podemos afirmar que los diferentes departamentos de una empresa son los "clientes" de recursos humanos. Son con ellos con los cuales tenemos que gestionar sus peticiones de personal una vez que éstas estén previamente justificadas y aprobadas conforme a sus previsiones anuales reflejadas en los correspondientes presupuestos internos.

"NECESITO GENTE" no es la forma de pedir un recurso. Está claro, que debemos inculcar entre nuestros compañeros que nos pidan "gente" que utilicen aquellas herramientas que nos permitan seleccionarles a los candidatos adecuados.

Necesitaremos, pues, un perfil, con aquellas características que sean requeridas, experiencia, conocimientos específicos, incluso, rasgos personales si fueran necesarios.

Lo único que hay que tener claro es que, antes de poner en marcha el correspondiente proceso de selección, se ha tenido que producir un trabajo previo de coordinación entre el solicitante del recurso y el encargado de buscarlo. Además, se tiene que justificar adecuadamente la necesidad real de ese recurso.

Es fundamental, para poder ser efectivos en el proceso, avisar con tiempo suficiente para que el departamento de recursos humanos pueda poner en marcha el proceso selectivo completo más adecuado en función de cada solicitud. Lo ideal sería que al menos se pudiera avisar con una antelación de 3 a 4 semanas porque las necesidades de recursos no surgen de un día para otro, a no ser que sea un baja voluntaria no esperada.

Ocurre, de vez en cuando, que se puede proveer dicho recurso a través de promoción interna. Para eso, bien los responsables de cada departamento pueden valorar a candidatos internamente, o bien, pueden presentar su candidatura aquellos trabajadores que estarían interesados en promocionar siguiendo el cauce adecuado.

Otras veces, es necesario echar mano de ayuda externa para cubrir determinados perfiles. Pero para poder analizar qué es lo más conveniente, es necesario contar con el tiempo lógico para poder hacer las cosas de modo profesional.

Recomiendo también exigir la oportuna petición de ese recurso por escrito, especificando aquellos requisitos imprescindibles que tenga que tener el candidato finalmente seleccionado. Así, se evitarán posteriores malentendidos de diferenciadas entre lo solicitado y lo seleccionado. No olvidemos que el departamento de recursos humanos se tiene que guiar por aquellos aspectos que cada departamento determine necesarios. Cada departamento, necesitará un perfil distinto y la selección del recurso adecuado tendrá que estar muy bien definida, para que el candidato sea adecuado para el puesto.

Esto es lo ideal, sin embargo, los procedimientos están muy bien a nivel teórico, eso si luego en la práctica los diferentes profesionales no los cumplen porque les resulta más cómodo hacerlo a su manera.

Voy a pasar a detallar los errores más habituales:

- Presentar una previsión de necesidades de personal a principios de año totalmente irreal y que posteriormente descuadra por mucho con la realidad de este departamento. Esto pasa por hacer el estudio previo de forma aleatoria. Después sobran recursos cuando anteriormente faltaban y se tienen que tomar medidas drásticas.

- Solicitar nuevas peticiones de personal que posteriormente se cancelan porque observan que haciendo reestructuraciones dentro de sus departamentos no es necesario incorporar a ningún nuevo recurso. Hay que saber a ciencia cierta la ocupación real de cada miembro de nuestros equipos para evitar exceso o escasez de trabajo para los recursos habituales de cada área de nuestra organización.

- Pedir un recurso con determinadas especificaciones y tras incorporar lo solicitado resulta que no encaja con los que pidió el departamento pertinente porque indica que no cumple determinado requisito que no especifico en la petición escrita inicial. No se pueden dar las cosas por echas o por conocidas si no se indican detalladamente en las especificaciones concretas de cada nueva necesidad de personal. Cuanto más se concrete lo que se necesita más probabilidad de encontrar candidatos que encajen con lo pedido en el menor tiempo posible. También tiene que haber coherencia entre los que se pide y lo que se ofrece.

- Incumplir los plazos lógicos para hacer las peticiones de nuevos recursos al departamento de recursos humanos. Los diferentes departamentos tienen que ser conscientes de la mayor o menor dificultad para cubrir cada nuevo perfil solicitado para en función de eso adelantar la petición lo máximo posible. Un proceso de selección lleva su tiempo el poderlo hacer bien.

Es fundamental que haya coordinación entre el departamento de recursos humanos y los responsables de pedir los nuevos recursos de cada departamento para ir todos en la misma línea.

Está claro que surgirán complicaciones en el camino, sin embargo, no hay nada imposible con predisposición a hacer lo mejor para los intereses de la compañía.

En caso de no solicitar las nuevas peticiones de recursos conforme al procedimiento establecido y adecuado en cada compañía, pienso que habría que denegar esa nueva incorporación, hasta que se solicite conforme a lo estipulado en el protocolo interno de la compañía. De esta manera, acostumbramos a nuestros "clientes internos" a hacer las cosas de la forma correcta. Eso sí, este tipo de decisiones tienen que venir avaladas por la cúpula directiva para evitar interpretaciones dispares de las reglas comunes a todos.

Aunque sea reiterativo, es fundamental tener claro los procedimientos, para que, de forma organizada, sea efectivo cualquier proceso de selección. La empresa, es la que, así, sale ganando.

lunes, 10 de marzo de 2008

BLOG NOMBRADO "BLOG DEL DÍA" HOY 10/03/2008

Agradezco el nombramiento de Blog del Día, hoy lunes 10/03/2008, algo que me hará continuar apostando por tener este blog actualizado, seguir opinando como lo he hecho hasta ahora, e ir aportando más ideas y comentarios sobre todos los aspectos relacionados con el interesante mundo de los Recursos Humanos.

También quiero aprovechar para dar las gracias a todos aquellos que me leen, y sobretodo a aquellos que dejan su opinión, cosa que agradezco. Además, animo a aquellos que no lo han hecho hasta ahora, que sus comentarios también serán bienvenidos.

domingo, 9 de marzo de 2008

LA VISIÓN DEL "NUEVO"

Cuando un profesional comienza una aventura profesional en un nueva organización se le presentan muchas preguntas.

No olvidemos que, hasta ese momento, conocemos de esta nueva organización lo que nos han ido contando en las diferentes fases del proceso de selección y lo que hayamos podido investigar de la misma en la red a la hora de preparar la entrevista.

Aun así, no deja de ser teoría que puede o no coincidir con la realidad que nos vamos a encontrar una vez incorporados.

Así como los candidatos nos cuentan lo que les interesa, las personas que representan a las organizaciones hacen lo mismo; ellos tienen que "vender" la organización a la que representan. Depende de esas personas que se diga la verdad o que la "maquillen". Sin embargo, eso es cuestión de principios que, tarde o temprano, darán sus frutos o no.

Las primeras semanas para un trabajador recién llegado a una nueva empresa son duras porque todo le resulta desconocido y le genera dudas porque una cosa es los que se hubiese imaginado y otra cosa lo que se encuentre. Ya sólo recordar los innumerables nombres de las personas que están ya trabajando es un hito.

La idea certera de la nueva organización no se consigue hasta haber pasado entre 6 meses y 1 año de permanencia en la misma. Al principio se idealiza todo porque lo desconoces y eso te ayuda en la evolución del proceso de adaptación y asimilación de la realidad.

Las preguntas que uno se formula antes de comenzar en un nuevo trabajo y que no conseguirá resolver hasta estar embarcado en el mismo son:

¿Qué tal será el ambiente de trabajo?
¿Las funciones a desempeñar serán las indicadas?
¿Cómo serán mis compañeros de trabajo?
¿Qué tipo de jefe me habrá tocado?
¿El puesto será lo esperado?
¿Los valores de la compañía encajaran conmigo?
¿Qué estructura de trabajo nos encontraremos?
¿Será una compañía organizada o no?

Por supuesto, hay que dejarse llevar en ciertos momentos por las corazonadas que todos tenemos y que suelen ser buenas porque a veces la realidad no es lo que nos hicieron creer.

Ante todo, no te dejes influenciar por nadie que ya esté en la empresa. Tenemos que ser lo suficientemente objetivos para saber ver las cosas tal y como, sin interferencias de ningún tipo.

Así que ten paciencia y piensa que los comienzos en una nueva organización son duros para todos; ahora te toca demostrar que realmente estás capacitado para desempeñar el puesto para el cual has sido contratado y, así, cumplir las expectativas puestas en ti.

Tomate tú tiempo para ir analizando si lo que te han "vendido" de la organización es realmente la verdad. Normalmente, suele coincidir porque eso diferencia a las buenas de las malas organizaciones.

ESPERANDO EL CAMBIO

Estamos en una sociedad que cambia rápidamente y en la que se nos quiere vender la imagen de que las cosas que suceden alrededor de nuestras propias vidas tienen que cambiar al mismo ritmo trepidante.

Desgraciadamente, la realidad es totalmente diferente a como la pintan y los cambios que todos en un momento dado pretendemos conseguir en algún aspecto de nuestra vida cuestan en llegar más de los que nos gustaría.

Las cosas llevan su proceso y normalmente suceden o no por algo, lo que pasa es que la paciencia humana no alcanza a comprenderlo. Solamente queremos que pase el cambio deseado al instante de buscarlo y esto solo pasa en la ficción de las películas de sobremesa del domingo.

Eso no quiere decir que no lo merezcamos o que no estemos preparados para ello sino que los cambios cuestan. A pesar de nuestra dedicación, preparación, esfuerzo, etc., por lograr el ansiado cambio, esto no garantiza el éxito inmediato.

Es una carrera de fondo que a pesar de los impedimentos que nos obstaculicen alcanzar la meta más tarde de lo que quisiéramos no nos tiene que hacer tirar la toalla. Al revés, nos tiene que hacer seguir adelante por conseguir el cambio buscado en cualquier faceta de nuestra vida.

Eso sí, lo tenemos que hacer sin la sensación de que perdemos algo con cada decepción que nos encontremos en este largo camino hacia el cambio soñado. Porque la obsesión con ello es peor y aun hace más larga la espera.

Entiendo que es muy fácil decirlo y muy complicado hacerlo en la realidad, sin embargo, no hay nada imposible ya que las limitaciones nos las ponemos nosotros mismos en función de la mentalidad con que encaremos estos procesos previos a conseguir cambios en nuestra vida.

Hay que ir paso a paso; voy a poner un ejemplo: muchos profesionales se encuentran frustrados en su actual puesto de trabajo y comienzan a buscar un cambio profesional que lleva más tiempo del deseable. Pueden estar muy preparados pero eso no garantiza el obtener resultado positivo inmediatamente.

Para más de una de esas candidaturas realizarás entrevistas personales de trabajo de las cuales saldrás con la sensación de que eres el candidato ideal. Aun así, parte del éxito depende de otros factores que no puedes controlar y que son imprevisibles.

En el duro proceso de espera, no se te ocurra pensar que no vales o que esto solo te pasa a ti, porque es la realidad de la competencia que se vive en el mercado laboral actual.

Todo llega, así que a esperar que surja esa oportunidad.

sábado, 8 de marzo de 2008

REUNIONES... O PÉRDIDA DE TIEMPO

¿Quién no tiene hoy en día innumerables reuniones a las que asistir?

En el mundo profesional el tiempo cada vez es más importante y hay que saberlo gestionar muy bien para sacarle el máximo partido. No nos podemos permitir el lujo de desperdiciar ningún minuto de nuestra jornada en tareas innecesarias.

Hasta aquí, todos de acuerdo, sin embargo, ¿
cuánto tiempo imprescindible de muchos trabajadores de perfiles medios/altos se desperdicia en largas reuniones a las que no haría falta que acudiesen?

A las reuniones tienen que acudir aquellas personas que tengan algo que aportar en la misma o a las que les afecten las cosas a tratar.
Los profesionales que tengan que enterarse de lo tratado en las mismas no es necesario que acudan ya que para eso debe existir un resumen de los acuerdos a los que se han llegado en las mismas.

Luego lanzo una pregunta ¿Las reuniones de trabajo duran el tiempo necesario? En la mayoría de las ocasiones duran más de lo necesario por no llevar algunos asistentes los temas preparados, por no ceñirse a los temas del orden del día, por no concretar en lo realmente importante, por no cumplir los horarios estipulados y por otras tantas cosas que se pasan por alto porque se consideran males necesarios. Un clásico de pérdida de tiempo en reuniones en España,
consiste en conducir la reunión a un tema fuera del orden del día con el objetivo claro de colgarse medallas...

Todos estos casos y alguno más, que seguro que todos padecemos, claramente demuestran una mala gestión del tiempo y falta de organización. En muchas ocasiones, una solución vendría dada por que quien convoque la reunión haga de moderador o nombre a alguien que lo sea, que controle tiempos y orden del día de la reunión, evitando así que nos vayamos por "los cerros de Úbeda".


Todo ese tiempo perdido por nuestros profesionales en reuniones a las que no era necesaria su asistencia es un coste y no una inversión; las reuniones son necesarias, por supuesto, pero en su justa medida. Así que antes de convocar una reunión hay que plantearse una serie de cuestiones a resolverse antes de su celebración:
  • ¿Finalidad de la misma?
  • ¿Asistentes realmente necesarios?
  • ¿Orden del día?
  • ¿Calcular el tiempo necesario para cada tema?
  • ¿Quién va a elaborar el resumen de la misma?
  • ¿Temas que es necesario dejar zanjados en la reunión?

Otro gran problema que se genera de la mala organización de las reuniones, es el seguimiento de los acuerdos.

Tras una reunión, debe quedar bien claro QUIÉN debe hacer QUÉ y CUÁNDO debe estar el tema resuelto, para así, de ser necesaria una reunión de seguimiento, poder ir a ella debidamente preparado el que tenga que hacer las diferentes labores y aquellos afectados, sepan a qué atenerse.

Estamos en España, es cierto. Pero eso no es excusa para no saber resolver las reuniones.

miércoles, 5 de marzo de 2008

INVOLUCRACIÓN

Cada vez más, las organizaciones precisan la implicación de sus trabajadores para conseguir que los proyectos que la representan sigan alcanzando grandes cotas de éxito.

Hoy en día, las cúpulas directivas de todas las compañías solicitan e incluso exigen a sus mandos intermedios que consigan la involucración de todos sus trabajadores en los proyectos que participan y que la representan.

Eso sí, no son conscientes de que esto es muy difícil de conseguir y que para poder exigirlo tiene que haber preparado el camino, paso a paso, para lograrlo. Todo lleva su proceso y si en una compañía no se involucra su personal, lo primero que tienen que preguntarse sus dirigentes es un par de cuestiones ¿Qué motivos he dado a mis trabajadores para implicarse? ¿Qué debería hacer para conseguirlo?

Desgraciadamente, estas cosas no se pueden conseguir a la fuerza, es decir, la implicación en la compañía tiene que surgir de forma espontánea por parte de sus miembros. No olvidemos que involucrarse con la organización no es simplemente desempeñar el trabajo adecuadamente sino que es vivirlo y sentirlo como una pequeña parcela de tí, que te reconforta, porque ha llegado a lo que es por los granitos de arena que vas aportando tu y todos los miembros que la representáis.

Si no se consigue, hay que detectar qué muros son los que hay que superar. Una vez detectados, tenemos que ponernos manos a la obra para derribarlos y una vez conseguido, sino conseguimos su involucración, la conclusión es que quizás no tengamos a las personas adecuadas.

Voy a proceder a enumerar los frenos o muros más habituales que hacen que los trabajadores se echen atrás cuando hay que implicarse en su trabajo:

- El superior jerárquico muchas veces frena a los miembros de sus equipos a implicarse debido a que no sabe transmitir de forma clara los objetivos a alcanzar. Por otro lado a veces no saben motivar ni incentivar a sus trabajadores en los proyectos que participan porque el primero que no lo hace es él. Es fundamental elegir de forma correcta a los mandos intermedios ya que de ellos va a depender en gran medida que sus subordinados, den la talla o fallen a la hora de representar, día a día, a la compañía.

- Cuando los objetivos que tenemos que conseguir son inexactos o contradictorios es muy difícil que los miembros de la compañía den lo máximo de si mismos por ella; no tienen claro el objetivo, ni mucho menos se les ha explicado correctamente qué se espera de ellos, además de no ser conscientes de que su trabajo es importante para la compañía.

- Falta de autonomía de nuestros trabajadores. Si en su trabajo diario están constantemente supervisados hasta en las tareas más sencillas no vas a conseguir que se sientan responsables del trabajo que desempeñan. Si quieres conseguir que sean responsables se les tiene que dar autonomía en el desempeño del mismo. Así se sentirán valorados y conseguirán una mayor implicación en lo que hacen porque sentirán que se confía en ellos.

- Inexistencia de procedimientos claros. Esto haces que los trabajadores no se involucren porque perciben que no hay claridad, transparencia y homogeneidad en las actuaciones a seguir por su compañía en situaciones similares que son tratadas de forma subjetiva en función de quien sea su protagonista. Para evitar esto tenemos que aplicar las mismas reglas del juego a todas las personas, sin hacer distinciones por el rol que ocupen en la empresa. Es esencial que estén bien definidas las políticas de la compañía para evitar malentendidos.

- No percibir que formas parte del juego. La consecución de objetivos ha de tener su recompensa. Para ello, es lógico que aquellos que demuestren esfuerzo y buen hacer tengan su recompensa. Aparte de un "gracias", que nunca nos viene mal a nadie, se suele optar por un aumento salarial. Claro está, este aumento ha de estar justificado, sino, el ajuste salarial dejará de ser visto como un aliciente para realizar el trabajo correctamente. El tipo "dorador de píldora" que tiene toda empresa, no ha de ser visto como el método de llegar al aumento salarial.
Así que los trabajadores de una compañía tienen que sentir que tienen mucho que ganar o perder en función de lo hagan en el terreno de juego de su puesto de trabajo.

- Percibir que tu compañía, a parte de estar saneada económicamente, no tiene un proyecto de futuro solidó a nivel global que hace que los miembros de la misma no se impliquen de forma excepcional porque perciben que dentro de la misma hay desunión y conflictos superfluos evitables. Lo que engrandece a una compañía es el personal que forma parte de ella y todos tienen que ir en la misma dirección porque sino tendremos un buen continente al que le hará "perder gas" su contenido.

Así que para exigir involucración antes hay que analizar si tenemos los ingredientes correctos para conseguirlo en nuestras compañías. Por lo tanto, hay que ser más autocráticos y exigentes con las personas que nos tienen que ayudar a conseguir la máxima implicación en nuestra organización.

Si conseguimos crear un buen ambiente de trabajo donde todos los integrantes sientan que son partes importantes del mismo. Además permitimos y aceptamos los errores de los miembros de nuestra compañía para que, así, aprendan y evolucionen, día a día, en el desempeño de su trabajo les estaremos transmitiendo ilusión a los integrantes de nuestro barco.

Con todo esto, haremos que, de forma natural, surja la implicación de los trabajadores que quieran llegar a ser alguien en la compañía que valora los esfuerzos y los recompensa. A parte de no tratar a todos por igual, ya que hay que tratar a cada uno como se merece porque el sacrificio de todos no es el mismo y se tiene que reflejar en el día a día.

domingo, 2 de marzo de 2008

¿VALORAMOS REALMENTE EL TALENTO?

En la actualidad, en España, se está produciendo el fenómeno de los programas de televisión en los diferentes canales de temática similar para demostrar si se tiene talento o valía en diferentes disciplinas. El nombre de estos programas, su formato y su jurado es diferente, sin embargo tratan sobre los mismo y caen en los mismo errores.

Para empezar la limitación de tiempo; creo que no se puede demostrar si se tiene talento en tan solo 3 minutos, ante el criterio subjetivo de un jurado. Si lo comparamos con nuestras entrevistas, nosotros les dedicamos bastante más tiempo, porque no buscamos que alguien sepa cantar, bailar o hacer el "parias". Queremos alguien, que pudiera hacer cualquiera de estas actividades, pero que encaje en la empresa, por lo que nos interesa también su actitud, su experiencia anterior, sus capacidades de adaptación, ... vamos, una larga lista de cualidades y aptitudes necesarias para nuestra empresa. ¿Os imagináis si nuestras entrevistas durasen simplemente 3 minutos?

Está claro que la televisión es dinámica y funciona de esta manera, al fin y al cabo, lo importante es la audiencia, no el ganador del programa. Sin embargo, hay que dejar a los concursantes que hagan su espectáculo en el tiempo necesario para demostrar lo que hacen, cumplan o no con el perfil buscado; antes que nada el jurado tiene que ser profesional y tener respeto hacia todos los concursantes, algo que no pasa de forma habitual en estos programas. ¿O acaso nosotros nos levantamos y le decimos a algún candidato flojo, "¡ALE!, que no eres lo que busco, ¡adiós!" ? Pues como que no. Lo que para ellos es una herramienta de audiencia, para nosotros, no es válido. Tenemos que actuar con más tacto.

Sin olvidar que tener valía en una disciplina o profesión, cuesta mucho esfuerzo y sacrificio alcanzar un nivel adecuado. La preparación previa es esencial; nadie nace enseñado. Lo mismo nos pasa a nosotros cuando vemos que algún candidato hace la entrevista y no se la ha preparado... no sabe nada de nuestra empresa, de lo que hacemos, o incluso, no sabe explicar con claridad su experiencia laboral. ¿Qué podemos esperar de ese candidato?

Las menos veces, nos encontramos con una persona que, de forma innata, tiene una habilidad o facilidad determinada. Pero no por ello ha de bajar la guardia y no prepararse. Sólo así se logra alcanzar el éxito y si no se hace, se recibirán muchas negativas. Tenemos que aprender de las dificultades y resultados negativos ya que nos tienen que ayudar a reconocer nuestras carencias para trabajar en mejorarlo y así alcanzar nuestro sueño.

Las personas que ante las negativas tiran la toalla demuestran que realmente no querían alcanzar esa meta porque demuestran que no tienen interés en seguir preparándose para ser un buen profesional en aquello elegido para vivir.

El éxito (bien de un programa o bien de un puesto de trabajo) cuesta alcanzarlo y hay que ir paso a paso. Tenemos que ir consolidándonos de forma progresiva para obtener nuestro objetivo. Lo que se consigue sin esfuerzo desaparece más rápido de lo que llegó. Normalmente debido a que no se valora ni se cuida para no perderlo.

En fin, estos programas, al fin y al cabo, no se alejan de nuestra labor de selección. Es una forma más abreviada, centrada, no en la búsqueda del mejor candidato, sino, del espectáculo. Ahí es donde nos diferenciamos. Para ellos, el fin del programa, es el fin de la necesidad del candidato. A nosotros, por el contrario, es el principio.