lunes, 13 de julio de 2009

¿TRABAJO O REALITY SHOW?

Hace ya unas cuantas semanas, leí en prensa que la cadena de televisión Fox está preparando, a pasos agigantados, un reality show para la pequeña pantalla, titulado Someone's gotta go (Alguien se tiene que ir), para el cual, aun no está prevista la fecha de comienzo. La idea de este concurso es: empleados de empresas reales que pasan por apuros económicos tendrán que decidir cada semana qué trabajador es despedido por ellos tras recibir del jefe (único intocable) la información referente al salario que cobra cada uno de ellos, evaluaciones del desempeño y toda la información relevante de índole laboral de cada uno de los trabajadores. Con toda esta información, tendrán que consensuar una decisión con el razonamiento que a ellos les parezca, es decir, todo vale.

El programa es idea de Fox y la cadena tiene los derechos para Estados Unidos, pero ha encargado la producción a Endemol, la compañía holandesa que lanzó el programa Gran Hermano, así que, tarde o temprano, tendremos que “sufrirlo” en España.

Por supuesto, este tipo de programas tratan temas de actualidad aunque con el único fin de hacer negocio de la desesperación que sufren millones de ciudadanos anónimos en todo el mundo que han perdido su puesto de trabajo o tienen posibilidad de hacerlo.

Si pensábamos que habíamos visto todo ya en el mundo de la televisión, parece que no.. Los seres humanos somos morbosos y cotillas por naturaleza, por lo que no será descabellado asegurar que alcanzará cotas de audiencia increíbles, ojala me equivoque.

Obviamente, cuando las empresas pasan por situaciones económicas adversas se deben reducir costes, intentando por todos los medios que el despido de trabajadores sea la última consecuencia. Sin embargo, este programa ya da por hecho que la única opción es despedir a trabajadores y no intentar ajustar costes por otro lado, ahorrando en viajes, gastos varios, reubicando al personal, etc. ¿Quién será el ganador? ¿Cuándo terminará el concurso? Esto aun no ha transcendido y espero que tengamos suerte y que este concurso al final no vea la luz.

Esto es jugar con algo muy serio y delicado porque la imparcialidad e injusticia primará en la toma de decisiones de qué trabajador deberá abandonar la empresa cada semana; los complots y zancadillas estarán servidos y veremos como cada trabajador saca lo peor de si mismo, haciendo que semana tras semana trabajadores rentables y con un desempeño magnífico sean despedidos por otros que trabajan menos y que son más prescindibles; podríamos afirmar que el programa dejará patente si los menos trabajadores, pero buenos estrategas, serán los que puedan garantizar el futuro de la empresa. Al fin y al cabo, el fin del concurso es reducir costes de personal de forma arbitraria y no sabiendo qué personas son prescindibles para quedarnos con las personas que van a garantizar el futuro y supervivencia gracias a su valía y trabajo. ¿Serán las empresas con grandes hermanos encubiertos?

Pero si además, mezclamos al público en la toma de decisiones, me temo que permanecerán los más vividores y vagos que hagan entretener a las personas, olvidando que se debe valorar el trabajo que aporta cada trabajador y prescindir de los que menos aportan, independientemente de lo que cobren.

Por supuesto, el jefe es intocable, aunque sí que se verá expuesto a las críticas y frustraciones de sus empleados, que podrán manifestarle sus quejas por las injusticias de las decisiones.

Igualmente, se vulnera por todos los sitios, la confidencialidad de datos personales y profesionales de cada trabajador que sólo incumben a cada trabajador y al departamento de recursos humanos, encargados de gestionar esos datos. Así que los trabajadores os podréis negar a participar en esta pantomima que no tiene ni pies ni cabeza, sin embargo, la cadena de televisión organizadora “untará” bastante bien de dinero a las empresas participantes y a sus trabajadores para que acepten participar en este show que vulnera muchas libertades y que supone ir hacia atrás.

¿No sería mejor que hiciesen un programa de televisión que incentivase la creación de nuevas empresas innovadoras que generen puestos de trabajo? Pero claro se me olvidaba que esto no da tanto dinero porque el fin de estas productoras no es ayudar a las personas que no tienen trabajo a encontrarlo sino a ganar dinero a costa de ellos. Así que las personas que están sin trabajo o que tienen grandes posibilidades de hacerlo tienen que boicotear este tipo de programas en defensa de su dignidad.

¿Qué os parece esto?

6 comentarios:

Àlex Vallès dijo...

Hola
Otra inmoralidad que genera grandes beneficios.
Si lo genera una cadena privada no me parece ni bien ni mal. Allá ellos con su moralidad y sus beneficios. La propuesta que haces es acertada pero al fin y al cabo la TV es diversión y entretenimiento en la mayoría de los casos. Tu idea sería más propia para trabajarla desde la red, ¿no te parece?
Un abrazo

Juan Martínez de Salinas dijo...

Hola Álex,

La verdad que si aquí tenemos otro gran generador de beneficios independientemente de la falta de calidad del producto.

Por supuesto, cada cual puede producir los programas de televisión que quieren independientemente de que estén carentes de valores adecuados. Además no olvidemos que las cadenas de televisión hacen los programas que creen que el público demanda. Clones de este tipo de programas tienen audiencias brutales y no importa la calidad sino cuantas personas lo vean.

Si la idea que propongo seria mucho mejor para trabajarla desde la red a nivel global.

Un abrazo,

Juan

Gorka dijo...

Hola Juan,

Vaya tela de articulo. Llegará un dia que se hará un reality para ver el tipo de dieta sana que llevamos analizando durante 24 horas lo que tiramos a la basura (al tiempo)

Lo triste de la historia es que si se produce es porque se vende y si se vende es porque hay gente que consume esta "empanada grotesca" donde "todo vale"

Buena reflexion

Juan Martínez de Salinas dijo...

Hola Gorka,

Gracias por pasarte.

Pues a este ritmo vamos a tener reality show de cualquier cosa.

En efecto, cuando hacen este tipo de programas es porque saben que tendrán mucha audiencia y por lo tanto nosotros tenemos la culpa de que existan este tipo de programas. Y dudo mucho que vaya a cambiar al ritmo que vamos.

Saludos,

Juan

josé blunda dijo...

me parece bárbaro el artículo. Es un tema muy delicado que requiere distinguir lo que es el padecimiento ante la perdida de trabajo, de lo que es show.

Juan Martínez de Salinas dijo...

Hola José,

Gracias por pasarte y participar en mi blog.

En efecto, hay que saber diferenciar las cosas y no confundirlas como pasa en este caso perdiendo el respeto a cosas muy serias.

Saludos,

Juan